Opinión

División en la consejería de Medio Ambiente por las renovables del Maestrazgo: Bayona alerta del «alto riesgo» y Olona las apoya

El director general de Medio Natural envía a Madrid un informe desfavorable y muy duro contra los aerogeneradores, pero el consejero recuerda que es el INAGA el que «determina» la autorización del Ministerio y no ve «ningún aspecto crítico».

División de valoraciones dentro del Gobierno de Aragón respecto a los proyectos de aerogeneradores previstos en el Maestrazgo. La Dirección General de Medio Natural y Gestión Ambiental los define como de «máximo riesgo (no recomendado)» para el entorno en el que están ubicados en un duro informe remitido al Misterio de Transición Ecológica, que es el organismo que debe autorizarlos por superar los 50 MW de potencia. El documento está firmado por el director general de Medio Natural y Gestión Forestal, Diego Bayona (Podemos). Sin embargo, el propio consejero del departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Joaquín Olona (PSOE), ha restado importancia al documento y aclarado que el único informe «determinante» para le Ministerio en la Declaración de Impacto Ambiental es el del INAGA (Instituto Aragonés de Gestión Ambiental) como órgano ambiental de la comunidad autónoma y sin el cual el Ministerio no podría tramitar la autorización. El informe del INAGA se está tramitando y «no presenta ningún aspecto crítico» en estos parques. «Las renovables tienen un argumento poderoso para la transición ecológica. ¿Cómo podemos hacerlo sino? Estos proyectos benefician totalmente al territorio, generan beneficios inmediatos, económicos, financieros y que permiten abordar mejoras ambientales y en la gestión de nuestros montes. Contribuyen en definitiva a la mejora de las condiciones ambientales«, ha dicho Olona.

El consejero contesta así a la polémica generada por el informe de Medio Natural y que responde a una“consulta” del Miteco sobre la Autorización Administrativa Previa y Declaración de Impacto Ambiental del conjunto de los 22 parques eólicos que constituyen el Clúster planteado para el Maestrazgo.

Analizada la documentación remitida y la disponible por la Dirección General, el escrito señala algunas cuestiones “que deberán ser tenidas en consideración” por parte del Ministerio en el momento de la resolución del procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental. Una de las principales conclusiones que se remarcan es que “gran parte de la actuación” se ubica en una zona catalogada como “de máximo riesgo (no recomendado)” en relación a la instalación de energía eólica, por el valor del Índice de sensibilidad Ambiental. El propio Ministerio define este índice como una herramienta  “determinante a la hora de evaluar proyectos a ubicar en las zonas con muchos condicionantes ambientales como es el caso”, tal como consta en el informe.

Según el informe el área donde se ubicarán las actuaciones se corresponden con una zona relevante para la supervivencia de determinadas especies de fauna referidas en el escrito e incluidas en el Catálogo de Especies Amenazadas de Aragón. Se destaca la presencia de especies como el águila calzada, culebrera europea, alimoche común, buitre leonado o «la cada vez más frecuente» presencia de quebrantahuesos en la “zona afectada” por el Clúster. La presencia de estas especies como reproductoras en el entorno inmediato  supone “al menos un riesgo cierto de desaparición de la población reproductora en los lugares afectados y alta probabilidad de mortalidad directa de ejemplares”, tal como consta en el informe. La implantación del Clúster, además de «elevar el riesgo de colisión y muerte de ejemplares», supondrá una “pérdida de aéreas de alimentación y nidificación”, que constituyen parte del hábitat de estas especies. Algunas de las zonas están catalogadas como hábitats de interés comunitario.

El informe habla también de que el “fuerte impacto sinérgico” supondrá una «grave afección» al mantenimiento del “adecuado estado de conservación para los valores naturales que han llevado a la designación de los espacios de la Red Natura 2000 ubicados en el entorno inmediato». Además los riesgos potenciales para la fauna genera también “un efecto barrera que impedirá la adecuada conectividad indispensable entre espacios de la Red Natura 2020”.

El documento destaca que el Estudio de Impacto Ambiental sobre las especies de flora catalogadas, se basan principalmente en una “revisión bibliográfica”, y plantea la necesidad de incluir los resultados de la prospección botánica en cada una de las zonas con infraestructuras, modulando si fuera necesario el diseño del proyecto y de las obras accesorias con el fin de minimizar o suprimir los posibles efectos negativos sobre las especies o formaciones afectadas.

Con relación a los espacios naturales de distintos grados de protección se informa de la «afección indirecta» más que probable a los objetivos de de conservación de la Zona de Especial Protección de las Aves (ZEPA) Río Guadalope –Maestrazgo, y la «afección directa» a los objetivos de conservación de las Zonas Especiales de Conservación (ZEC) Muelas y Estrechos del Río Guadalope, Rambla de las Truchas y Maestrazgo y Sierra de Gúdar. El Estudio de Impacto ambientas argumenta porcentajes de afección bajos sobre los hábitats de interés comunitario en relación a superficies totales como las de cada parque o el propio Clúster.

Por último el informe indica que la «magnitud de las obras proyectadas» deberá contar con las correspondientes autorizaciones  según lo regulado en la Ley de Vías Pecuarias de Aragón y en e texto refundido de la Ley de Montes de Aragón. “En cualquier caso se deberá garantizar que las instalaciones proyectadas no alteren ni impidan los usos legales o complementarios, entre ellos los ecológicos, evitando causar cualquier tipo de daño ambiental”, concluye el escrito.

El proyecto en estudio consiste en la construcción de 22 parques eólicos ubicados en los municipios de Cantavieja, Fortanete, La Iglesuela del Cid, Mirambel, Mosqueruela, Puertomingalvo, Tronchón y Villarluengo. La potencia a instalar supera los 880 MW. Se contempla la instalación de 161 aerogeneradores de una potencia unitaria de 5.500 kW con una altura de torre de 120,9 y un diámetro de rotor de 158m.

«No existe ningún aspecto crítico»

A preguntas a la consejería de Agricultura sobre este informe el consejero Joaquín Olona ha recordado que la Declaración de Impacto Ambiental corresponde al Minsietrio para la Transición Ecológica. Respecto del resto de informes que el Ministerio solicita a los distintos agentes interesados el consejero ha querido «dejar claro» que el que «es absolutamente determinante» es el realizado por el INAGA, al constituir el órgano ambiental de la comunidad autónoma. Ha recalcado que en dicho informe del INAGA«no existe ningún aspecto crítico», en contraposición a lo que revela el informe de la Dirección General de Medio Natural.

Asimismo, el consejero ha querido poner en valor «el rigor técnico, administrativo y jurídico» relacionado con las autorizaciones ambientales que acredita el INAGA. «Este informe preceptivo en absoluto es ningún cheque en blanco, y no responde a ninguna otra cuestión, más que a la aplicación estricta de la normativa vigente».

Fuente: La Comarca.

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